jueves, 26 de junio de 2008

¡UNA SONRRRRIIISIIITA CHICOS!

Esto me lo envió mi buena amiga y compañera RO RO, celebrando su humor y para aflojarnos un poco de la seriedad y las pálidas circundantes lo comparto con Uds. La próxima semana estoy de vacaaaaasss!!!!! (bueno medias vacas porque tengo que prepararme pa`rendir) asi que estaré un poco más al corriente de la blogosfera!!!
¡¡¡¡¡¡LOS QUIERO!!!!!!!!!!!! ¡¡¡¡¡¡¡¡¡NO ME OLVIDEN!!!!!!!!!!!!
ESTÁ ABIERTA LA INSCRIPCIÓN EN EL EEMPA.
SE DICTAN CURSOS DE VERANO.
MUJERES: ¡PROHIBIDO REIRSE... NI ANDAR POR AHÍ GOZÁNDOLO!
CURSO DE FORMACION PARA HOMBRES
Objetivo pedagógico: Curso de formación que permite a los hombres desarrollar esa parte del cerebro de la que ignoran la existencia.
Los aranceles los pagarán sus adorables mujeres una vez aprobado cada módulo
Módulo 1: Curso Obligatorio
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1) Aprender a vivir sin su madre (2000 horas).
2) 'Mi mujer NO es mi madre' (350 horas).
3) Entender que el fútbol no es otra cosa que un deporte, que quedar fuera del mundial no es la muerte (500 horas).
Módulo 2: Vida de a dos.
1) Tener niños sin volverse celoso (50 horas).
2) Dejar de decir pelotudeces cuando la mujer recibe a sus amigas (500 horas).
3) Superar el síndrome de pertenencia sobre el control remoto (550 horas).
4) No mear fuera del inodoro (100 horas). Ejercicios prácticos en video.
5) Entender que los zapatos nunca van solos hasta el armario (800horas).
6) Cómo llegar hasta el canasto de la ropa sucia sin perderse (500horas).
7) Cómo sobrevivir a un resfrío sin agonizar.
Módulo 3: Tiempo libre.
1) Planchar en dos etapas una camisa en menos de dos horas (ejercicios prácticos).
2) Digerir cerveza, gaseosa o cualquier otra bebida sin eructar en la mesa (ejercicios prácticos)
Módulo 4: Curso de cocina.
Nivel 1 (principiantes): los electrodomésticos: ON = encendido OFF = apagado.
Nivel 2 (avanzado): mi primera sopa instantánea sin quemar la cacerola
Ejercicios prácticos: hervir el agua antes de añadir la pasta.
CURSO INTENSIVO Por razones de dificultad y de entendimiento de los temas, los cursos tendrán un máximo de 8 inscriptos.
TEMA 1: La plancha: desde el lavarropas al armario, ese misterioso proceso.
TEMA 2: Los riesgos de llenar la cubetera y su transporte al freezer (demostración con soporte de diapositivas).
TEMA 3: Uno y la electricidad: ventajas económicas de contactar con un técnico competente para las reparaciones, aún para las más básicas.
TEMA 4: Último descubrimiento científico: cocinar y tirar la basura NO provoca impotencia ni cuadriplegía (prácticas en laboratorio).
TEMA 5: Por qué no es un delito regalar flores aunque ya te hayas casado con ella.
TEMA 6: El rollo de papel higiénico: '¿El papel higiénico nace al lado del inodoro?' (Exposiciones sobre el tema de una generación espontánea).
TEMA 7: Cómo levantar la tapa del inodoro paso a paso (Teleconferencia con la Universidad de Harvard).
TEMA 8: No es necesario agitar las sábanas después de haber emitido gases intestinales (ejercicios de reflexión en pareja).
TEMA 9: ¿Los hombres que conducen pueden pedir información si se pierden, sin correr el riesgo de parecer impotentes? (Testimonios).
TEMA 10: Los detergentes: dosificación, consumo, utilización. Prácticas para evitar daños irreparables a la casa.
TEMA 11: El lavarropas: ese gran misterio de la casa.
TEMA 12: Diferencias fundamentales entre el canasto de la ropa sucia y el suelo (Ejercicios en laboratorios de musicoterapia).
TEMA 13: El hombre en el asiento del acompañante: ¿Es generalmente posible no hablar o agitarse convulsivamente mientras ella conduce y/o estaciona?.
TEMA 14: La taza del desayuno: ¿levita sola hasta la pileta? ejercicios dirigidos por David Copperfield).
TEMA 15: Análisis profundo de las causas anatómicas, fisiológicas y/o psicológicas que no le permiten secar el baño luego de la ducha.

¡BUENO...SEAN SINCEROS, MÁS DE UNO LO TENDRÍA QUE HACER !!
(Yo ya inscribí al Oso)
¡¡DEDICADO A BORDER EN SU CUMPLE!!!
(¡¡¡¡Vení papaaa que te soplo la velaaa!!!!)
AHI TA LLEGANDO MI REGALITO!!
( ¡De a una chee, de a una, que despues te empachas!

domingo, 22 de junio de 2008

¡¡¡PSICÓLOGAS DEL MUNDO UNIOS!!!!

Hola Gente, esto lo escribió una psicóloga residente de Cordoba, me parece importante su difusión porque no es algo que suceda en otras provincias. Los que trabajamos en el sistema de salud lo vemos diariamente: si tenés un conocido, conseguís un contrato aunque todavía estés festejando porque te recibiste hace dos días. No interesa si estudiás, si te formás. Hasta parece ser requisito el no tener ningun tipo de práctica previa para trabajr en un servicio de pacientes crónicos, de adictos o en donde ud prefiera. Son contadas las excepciones. Y estas excepciones, en donde se realizaron entrevistas para seleccionar alos profesionales, creo que demuestran la diferencia de quienes se comprometen con su trabajo que, en la salud mental, está lejos de circunscribirse a atender pacientes en consultorio u organizar algun que otro taller.
Queridos colegas:
Les escribo porque me resulta mas fácil expresarme por este medio que personalmente. Me comunico con uds por el respeto y cariño que merecen como profesionales, personas y compañeros. Lo que me está pasando es que me encuentro realmente muy cansada: no del trabajo, ni de los pacientes, ni de los compañeros, ni de formarme o de estudiar. Más allá de mis características personales que cada uno juzgará con su criterio puedo afirmar que siempre he sido una persona seria y comprometida con mis elecciones (aunque a veces no supe medir bien las consecuencias) de la misma manera que soy capaz de replantearme cada paso, cada movimiento...La vida de 'residente' no fue lo que esperaba. Con un esfuerzo y sacrificio que solo puedo valorar de manera subjetiva cursé los estudios universitarios y egresé de la carrera de Psicología con gran felicidad en el año 2001 comenzando a ejercer como lo hacen la mayoría de los colegas: inmediatamente, autogestionandosé lugares de inserción, peleandolá todos los días, no dejando de estudiar ni prepararme ni por un momento, viviendo con lo justo.
En el 2004 hubo 2 llamados a residencias para psicólogos en la provincia, uno era para la residencia de salud familiar con cupo para 26 psicólogos, otro para la RISaM con cupo solo para 7. Elegí la RISaM a pesar de los pocos cupos con la ilusión de trabajar en el Neuro que en mi ingenuidad era como 'la meca' y lo logré. A 4 años de aquel 31 de mayo de 2004 cuando firme mi convenio he decidido decir Basta. El desgaste generado por tomarme todo con gran responsabilidad, por el compromiso con los ideales de la salud pública y un sistema universalista y democrático de asistencia donde se respete el sufrimiento y el saber, con el compromiso de proponerme como una profesional capaz de brindar intelectual, humana y profesionalmente lo mejor a aquellos que de ningún modo podrían acceder a los ideales de eficacia y eficiencia que publicita el mercado con sus ficciones televisivas. (creo que todo eso fue gratificante porque pude comprobar cierto éxito en la clínica)En el recorrido fui guiada por excelentes personas y profesionales entre los que los incluyo y fui acompañada por mi familia, especialmente mis hijos que supieron resignar horas de guardias, de capacitación y de trabajo y me vieron llegar a casa a veces no con la mejor cara y con bastante cansancio. Creo ahora que estoy 'gastada', demasiada pelea por un respeto que no llegará. Situaciones de todo tipo: maltrato, persecución, malos entendidos, acusaciones falsas y humillantes, delitos contra mis pertenecias y mi persona. Ser obligada por la 'obediencia debida' a las autoridades a ocultar verdades y presenciar situaciones aberrantes contra pacientes indefensos. Aún así, todos los días fuí con mis creencias, mi ética y mi saber a trabajar. No me arrepiento pero hoy prefiero renunciar.
La directora del Neuro, aquella 'meca', me dijo personalmente que esto nunca fue un trabajo, que era un 'beneficio' que se nos había brindado a los profesionales, 'una suerte' y que debíamos estar agradecidos. Dijo también que de ninguna manera podíamos creer que la residencia nos daba derecho a un puesto de trabajo pero que igual llevemos los curriculums, que ella tenía una pila de estos pero los nuestros serían revisados primero si algo sale... negó que hubiera en los últimos años contratos políticos o de gente no formada y hasta se atrevió a decir que los últimos psicólogos ingresados al hospital habían concursado esos puestos. El colmo fue decir que no pierda las esperanzas que algún psicologo podía 'morirse, enfermarse o renunciar' y que en ese caso habría una vacante que de ninguna manera sería para mi, (claro que en esos términos quien desea un trabajo), 'de todos modos', dijo la doctora García Moreno, 'habrá lugares donde los psicólogos hagan más falta...como en seguridad social o algo así'... todas estas barbaridades tuve que escucharlas de pie a un costado de su escritorio ya que nisiquiera por educación me hizo sentar y por el simple hecho de que fui desprevenida a preguntarle si pensaba que antes de que la residencia terminara, ella y los jefes de servicios en nombre de la Institución nos harían algún tipo de devolución sobre el tiempo transitado allí y sobre que podríamos esperar de nuestro futuro laboral para el que fuimos formados. 'Ninguna reunión es necesaria', dijo la dra. 'esto es así, termina y ya...transmitiles lo que te dije a tus compañeros'.
Pues bien, si estoy agradecida: Gracias a los pacientes que ponen su cuerpo y su sufrimiento y de quienes cada día aprendo sobre la vulnerabilidad de la 'locura' y por quienes espero haber hecho algo que también les sirva. Gracias a mis compañeros residentes que también 'picaron la piedra' la piedra de la locura, del malestar, de la ingratitud y siguieron adelante hasta que se pudo: Jorge Leal, Belen Costamagna, Andrés Maldonado, Ingrid michel, Hernan Rugeri, Karina Herrera. A los que no nombro pero están en Instituciones tan o mas dificiles que 'la meca' y a los que deben seguir poniendo el lomo después de nuestra partida. También a los que estuvieron antes e intentaron hacer más llano nuestro camino. A los profesionales que apostaron y pusieron muchas fichas que hoy se lleva la banca. Incluso gracias a 'la dra' por darme una lección sobre el descaro que nunca me habían dado. Por si están preocupados le digo que no creo que esta carta sea un 'suicidio' profesional, hace rato que el cinismo y la pasión por la ingorancia comenzaron a herirme.
Lic. Carina Inés Zapata
Andrés Chazarreta 1733
Bº Los Naranjos
Cba Capital
C/P 5010
TE 156586043- 4655880

sábado, 14 de junio de 2008

NOS PUSIMOS SERIOS (Era hora.. jeje)


Debo Postear algo muy bueno e interesante que me ha enviado mi colega y amiga MIA, justamente sobre un tema que me enloquece. Se los dejo para que leeeean (porque es un poquitin largo, pero vale la pena) tooodo este laaargo finde!

Y, uniendome con mi amiga deseandoles a TODOS MIS AMIGOS BLOGUERS un:



¡FELIZ DIA DEL BLOGUER!




Por Maria Moreno

La palabra "hombres" al lado de la palabra "mujeres" atrae a todo público. Si va seguida de la frase "cómo salir del camino equivocado", siembra la misma lucecita de esperanza con que creyente, o no, se busca cada mañana en el diario el horóscopo del día. Pero –Hombres/Mujeres, cómo salir del camino equivocado de Elizabeth Badinter, editado por Fondo de Cultura Económica, es en realidad un libro crítico del feminismo francés mientras se diría, y esto es un lugar común, opone el feminismo a las mujeres. Lo primero que sorprende es que Badinter se ocupe de una polémica que tiene veinte años y la remoce para hostigar al feminismo francés acusándolo de que, bajo la tardía importación del feminismo angloamericano, ha favorecido una enorme regresión política. Badinter, que ya había alimentado a las furias femeninas cuando se opuso al cupo en las bancas francesas, retoma un debate ocurrido en Barnard College en 1982 y donde se encendiera la mecha para que dos brillantes feministas, las profesionales Catharine Mackinnon y Andrea Dworkin, iniciaran una carrera donde, partiendo de una crítica a la pornografía, se terminaba homologándola a la violencia efectiva contra las mujeres. Según ellas, que llegaron a proponer una ley antipornográfica, la pornografía era un material de análisis fundamental a la hora de presentar una teoría sexual de la desigualdad genérica. Al despersonalizar a través de sus representaciones obscenas las relaciones personales, éstas nada tienen que ver con el sexo sino con la violencia ejercida contra las mujeres, y se le atribuye el poder de incitar a la violencia efectiva. Las tesis del dúo terminaban retomando el abandonado esencialismo, instalando sólo un plus sobre las diferencias biológicas para adjudicar violencia a los hombres y a las mujeres, una inocencia que sólo podía convertirlas en víctimas. Esa tajante diferenciación entre los sexos, y esta confusión entre representaciones y acciones precisas, entre fantasía y violencia real, fueron discutidas en su momento por notorias figuras del feminismo mientras que las luego llamadas feministas antiporno eran apoyadas por las huestes de Ronald Reagan. Badinter, amén de usar esa bibliografía vencida cuyos efectos en Francia se abstiene de detallar, sostiene la capciosa idea de que el feminismo de la diferencia –ese que a través de figuras como Luce Irigaray o Antoinette Fouque abrevó en una relectura del psicoanálisis para redefinir la posición de las mujeres en el contrato simbólico al mismo tiempo que cuestionaba el valor que la femineidad tenía en las teorías dominantes– habría contribuido a que las mujeres emprendieran, luego de la penosa conquista del espacio público, la vuelta a casa. Badinter se ensaña con la especie de juridicofilia que atacó a las norteamericanas que llegaron a llevar a los tribunales la acusación de que un varón de cinco había besado a una de seis sin su consentimiento. Utiliza además un capítulo entero, haciendo gala de lo que podría llamarse un relativismo acusador, para denunciar la violencia de las mujeres a fin de desangelizarlas: Fueron el 10 por ciento de los efectivos de los SS; de 120.000 acusados de genocidio en Ruanda, 3564 eran mujeres. Si bien las cifras se dan en nombre de la buena fe, huelen a teoría de los dos demonios sólo que los dos demonios parecerían ser las feministas y los hombres con poder. Sin embargo el libro de Badinter podría ser ocasión para pensar hacia dónde va el feminismo en la Argentina, cómo reformular eso que parece sintetizarse en un "ya fue". Badinter, aunque no aclara cómo el feminismo de la diferencia con su edificación de la potencialidad maternal y de la soberanía femenina ha podido incidir directamente en las políticas de Estado, califica de "regresión" al salario maternal adjetivado como "asignación parental por escolaridad" por reducir a media jornada el trabajo fuera de casa, naturalizar que el cuidado de los niños correspondería a las mujeres, condenándolas a los trabajos menos calificados y a permanecer en la esfera doméstica en "la casa del padre". Este conflicto en un país donde las jefas de hogar han aumentado de manera alarmante equivale a reemplazar un tratamiento de diálisis por un diamante. Aunque los sucesos de 2001 hayan sacado a la esfera pública gran número de polleras combativas e incansables. –Y si este crecimiento es notable también significa un marcador de la crisis argentina –dice Ana Amado, profesora de Cine en la UBA y codirectora de la colección Género de Paidós–. Nunca la Argentina vivió una realidad como la que se reveló a través de esas cifras que la igualan con Ecuador, Colombia y Venezuela. Y esas mujeres para las que Badinter reclama guarderías no son las que volvieron a casa con media jornada para cuidar a sus hijos luego de unos triunfantes años sesenta que les dieron el derecho a la anticoncepción y al aborto sino que nunca ingresaron al espacio laboral más que como mucamas. "En los ochenta la salida de las mujeres al espacio público que se produce no casualmente en momentos de retracción de las políticas del Estado –dice Josefina Fernández, del grupo feminista Ají de pollo– produjo entre las feministas dos posiciones que podrían dividirse entre un fatalismo escéptico y un optimismo gradualista. Estaban quienes pensaban que esa salida al espacio –en realidad era más comunitario que político– iba a permitir gradualmente impugnar el principio masculino de ordenamiento del mundo. Las escépticas y fatalistas, en cambio, consideraban que lejos de ser una punta de lanza para la politización eso era el reforzamiento del principio masculino por el hecho de que ellas estuvieran ocupando espacios comunitarios pero reproduciendo la división sexual del trabajo. Entonces no se trataba de ninguna instancia emancipatoria. Porque muchas de estas mujeres organizaban ollas populares, comedores o sistemas de salud comunitarios".–De alimentar a los hijos a organizar un comedor, el paso es significativo.–Hay una activista peruana que define esa salida como sólo útil para convertir esos ámbitos comunitarios en escuelas donde las mujeres aprenden a hablar. A mí ésta me parece una apreciación no sólo dura sino equivocada porque, aun cuando sirva sólo para aprender a hablar no es poca cosa. Es cierto que no siempre la salida conduce a la toma de conciencia de la subordinación de género, pero eso está sujeto a cosas que tienen que ver con la subjetividad, con la experiencia de vida y con coyunturas políticas concretas. O sea que intervienen una serie de variables que habría que tomarse el trabajo de ver una por una para ver qué peso relativo tienen en el conjunto. Una compañera activista muy capaz trabajaba con mujeres de un asentamiento en Quilmes que al principio se autodenominaban "Asociación Madres del Barrio Tal" y, luego de un trabajo colectivo muy interesante y detallista, el grupo decide llamarse "Club de Mujeres del Barrio Tal". Y la justificación que hacen es que la idea de club era mucho más divertida que la idea de Asociación de Madres, lo cual fue un salto cualitativo: agregarle al nombre del grupo una connotación que tenía que ver con algo que no estaba previsto y era esa idea de que trabajar en comunidad era además "divertido". –Usted diferencia las prácticas feministas del principio de la dictadura como diferentes en el ámbito porteño y el de más allá de la Capital.–En los ochenta en la provincia de Buenos Aires hubo una buena cantidad de feministas que nos insertamos en el movimiento social de mujeres en trabajos comunitarios. Yo viví durante toda esa época en Quilmes, en la zona sur. Allí armamos una organización que se llamaba Casa de la Mujer María Luisa Martínez, que era el nombre de una desaparecida de la zona y que trabajó muy vinculada con las villas. En Rosario había organizaciones mixtas que trabajaban insertas en el movimiento popular de mujeres. Pero mientras las organizaciones porteñas tenían cierta visibilidad en los medios, la nuestra no. La única visibilidad que tuvo impacto en esa época fue una convocatoria que hubo para sacar a un violador de un barrio. Hicimos una caminata desde el centro de Quilmes, 200 personas, hombres y mujeres, jóvenes y viejos y el tipo se tuvo que ir del barrio. –Un escrache precursor. –Ahí se veía que esa salida de las mujeres al espacio público era una instancia de politización mucho más grande aun cuando fuera cierto, como es cierto ahora, que esta salida se produce en espacios que no están jerarquizados, ligados a la nutrición, salud, cuidados. Lo que yo llamo posición escéptica me parece fundamentalmente porteña. –También el feminismo tardó en insertarse en la temática de derechos humanos. María Helena Odone, a comienzos de la democracia, elaboró un documento donde prácticamente separaba a las Madres de Plaza de Mayo del movimiento feminista. –Pero hubo muchas críticas en el interior del movimiento mientras creo que el feminismo sigue sin ver qué significa la salida de las mujeres al espacio público. La Ley de Cupos, por ejemplo, dividió aguas hasta que se sancionó la ley. A mí me gusta mucho algo que dice Celia Amorós y es que el hecho de que haya mujeres en las áreas de poder, si bien no garantiza que esto favorezca a las mujeres en general, aunque sea en el orden simbólico permite consolidar de alguna manera que existe la posibilidad de que ellas estén en esos espacios. Hombres como mujeresEn la era de la globalización, pensar en términos como primero y tercer mundo puede resultar tan simplista como las antipornógrafas norteamericanas que oponen hombre violento a mujer pasiva y homologan heterosexualidad a violación. La socióloga Silvia Chejter intenta desplazar la lógica binaria que sitúa la existencia de rostros femeninos entre los que hoy encarnan la lucha popular visible en el paisaje de la comuna porteña y que podría incluir tanto a (la travesti) Lohana Berkins sentada en un banco de la escuela normal, como a Celia González (obrera de Brukman) encontrando nuevos frentes luego de que se parara junto a sus compañeras frente a las topadoras de la Villa 21 en tiempos del erradicador Cacciatore. –Las mujeres que estaban en el mercado de trabajo en puestos formales disminuyeron y aumentó la cantidad en lo que se llama sector informal de la economía, pero no sólo en los países latinoamericanos. Yo creo que esta etapa de intensificación del capitalismo global ha generado en todo el mundo una restructuración en la dinámica público/privado. Y cuando decimos dinámica público/privado no pensamos sólo en la familia y tampoco porque cambiaron las relaciones de poder entre varones y mujeres. De hecho las mujeres en los últimos cuarenta años han ganado en autonomía y si están peor en términos generales es porque se han empobrecido muchos sectores de la sociedad. O sea, se ha deteriorado la vida de todo el mundo. Acá todavía la desocupación masculina se incrementa menos que la femenina. Si ves la tasa de desocupación, las mujeres tienen trabajos más precarios, peor pagos, etc. Pero acabo de leer un estudio que habla de una masculinización de la fuerza de trabajo, sobre todo en México. Uno de los fenómenos novedosos de los cambios estructurales es la introducción de la maquila, una nueva unidad productiva donde la mayoría de las trabajadoras son mujeres jóvenes sin calificación, campesinas. Del ochenta hasta ahora el crecimiento ha sido en mujeres y en los últimos tres o cuatro años empezaron a incorporar hombres, pero hombres igual que mujeres, campesinos, incalificados. Es decir que ya hay una marca del género en estos cambios del mercado de trabajo. Entonces hoy hablar de las relaciones de género exige un proceso complejo. Los hombres están teniendo en la economía lugares clásicamente descriptos para las mujeres. –En los sectores intelectuales, y no solamente, apareció una suerte de nuevo romanticismo que se fascina con la aparición de las mujeres luchando en los piquetes, en las fábricas tomadas, en las ollas populares. En lugar de pensar en un avance político, ¿no ocupa eso el lugar de la política? Ellas hacen las tareas más duras, más prácticas, pero siguen sin estar en lugares de decisión. –En este proceso que señalaste se han generado cosas nuevas. El hecho de que las mujeres salgan al espacio público aun cuando sostengan actividades propias del género crea solidaridad, organización, etc. Hay que analizar esos nuevos procesos y ver qué pasa. Yo creo que tienen un techo. Y el techo va más allá de la voluntad de todos los deseos. Es una crisis real que se está viviendo a nivel mundial por las características que va asumiendo el proceso económico capitalista. Hay que tener en cuenta las macroestructuras. Pero en esas macroestructuras las mujeres tienen roles muy nuevos y todo el mundo lo señala. Incluso las características del movimiento migratorio hoy en día son diferentes. Hoy migran primero las mujeres. –A comienzos de siglo era clásica la llegada del hombre que, cuando se asentaba, mandaba el pasaje. –Ahora viajan ellas. Pero ¿dónde van? A cuidar ancianos, a trabajar en el servicio doméstico. Pero esperate diez años y los tipos van a estar cuidando niños. El yerno de una amiga que se fue a EE.UU. está cuidando viejos en EE.UU. y es un varón psicoanalista. La desocupación es también un gran tema en los EE.UU. La incorporación de tecnologías que restan valor al trabajo humano es un tema mundial.La victima vende De su crítica tramposa al feminismo antiporno y con la víctima como santo grial, Badinter extrajo un cuestionario que podía servir para detectar en qué medida se vive con un ser potencialmente violento y por eso potencialmente convicto. Incluía preguntas como éstas: "¿Le ha impedido encontrarse o hablar con amigos o miembros de su familia? ¿Ha hecho comentarios desagradables sobre su apariencia física? ¿Ha dejado de hablarle, se ha negado a toda discusión? ¿Le ha impuesto maneras de vestirse, peinarse o comportarse en público?". ¿Qué amante beatífico, algo pasional y celoso, podría pasar esta ingenua prueba? La mala fe de Badinter la induce a magnificar los efectos del feminismo antiporno, pero sólo tiene en cuenta a uno de sus dos polos y no a sus críticos, no reconstruye relatos de resistencia, hace guiños a los hombres sugiriendo que los besos robados de las películas de François Truffau podrían tener sentencia aunque carece del humor suficiente como para imaginar la entrada de Romeo por la ventana de Julieta como merecedora de un escrache organizado por las mujeres de Ravena. Pero en la Argentina, aun en los medios más progresistas, la víctima vende más y no necesariamente por un correlato entre prensa y justicia. "El infortunio es el equivalente de una elección, ennoblece a quien lo sufre y reivindicarlo es cortar con la humanidad ordinaria, convertir su superación en gloria (...) Sufro, luego valgo", cita Badinter de un texto de Pascal Bruckner. Y luego concluye que no sólo porque la víctima siempre tiene razón sino también por una conmiseración simétrica al odio sin piedad que una dispensa a su verdugo. –Creo que aquí el feminismo sigue atrapado en ese discurso victimista –dice Fernández–. Se consiguió la Ley de Cupo, se sancionaron leyes de igualdad de oportunidades en el mercado laboral y el movimiento prácticamente ya no existe. Queda el tema aborto y una vez que lo concedan –y no creo honestamente que sea por la lucha feminista sino debido en gran parte a políticas demográficas de los centros de poder–, ¿qué quedará? Porque todo el trabajo que está concentrado en el derecho al aborto es ya motivo de discusión en el Banco Mundial, en los organismos de Cooperación Bilateral para América latina. Este tema que tomó fuerza todos estos años podría atravesarse o insertarse más allá de la salud reproductiva. Por ejemplo en el plano de la sexualidad y de las identidades sexuales. Porque en el plano de la política pública lo que interviene son las estadísticas, el perfil socioeconómico de las mujeres que abortan. En cuanto al espacio del derecho, ya en EE.UU. durante los setenta había evidencias de que ese debate tenía que incorporar, por ejemplo, el tema de las identidades. Mientras las negras no se unían a la lucha de las feministas blancas progresistas, las blancas decían que era porque todavía no les había llegado la conciencia de género. Angela Davis, activista negra, contaba hace poco: "En realidad no nos sentimos convocadas porque nosotras veníamos de una historia de prácticas eugenésicas impulsadas por el gobierno estadounidense, de prácticas aborto autoprovocado resultado de una violación".Que queda, que faltaLa metáfora del camino siempre ha sido fecunda, en principio para Caperucita. Luego para el Dr. Freud que imaginó para el Edipo femenino un camino retorcido, intrincado a fin de que la heterosexualización obligatoria dirigiera sus pasos al padre. El feminismo, a pesar de sus prejuicios hacia la publicidad, levantó aquello de "Has recorrido un largo camino, muchacha". Y hoy podría decirse que en todo camino cortado por un piquete y donde seguramente hay una olla popular hay mujeres que, como hemos visto, invitan a las activistas de los feminismos a romper sus libros. Si bien Elisabeth Badinter no levanta la crítica más radical del Bernard Collage, lo que ahí cayó como una bomba fue el anuncio hecho por Gail Rubin de que el feminismo no había sido capaz de construir una teoría radical del sexo. –El debate comenzado en Barnard College –según Josefina Fernández–puso en claro que el feminismo no tiene una teoría radical sobre la sexualidad femenina, pero abrió la puerta para todo lo que después fueron los estudios gays-lésbicos y finalmente los estudios queer. Para el feminismo lo que tiene que ver con sexualidad siempre estuvo como arrastrado y perdido dentro del tema de la subordinación de género. El aporte de los estudios queer es que separan género de sexualidad y le atribuyen a la sexualidad todo un sistema de jerarquización que el feminismo no había advertido. Propuso trabajar el tema sexualidad en forma autónoma del tema género y eso para mí fue la punta de lanza para los estudios gay-lésbicos que no casualmente aparecen en la época del sida en los países centrales. En esa alianza ente varones gays y mujeres lésbicas que después terminan constituyendo los estudios queer, el eje es la heterosexualización y la sexualidad por sobre el género. Aquí los activistas de los Estudios Queer establecen alianzas estratégicas con sectores de clase, desocupados e identidades diversas. Por eso tiene un valor potencial que para mí no tiene otro movimiento. Es una política de articulación y otra forma de hacer política.¿Qué queda? Leyes sobre violencia doméstica, la reforma del Código Penal que ha reemplazado por términos más acertados los ataques a la honestidad aunque al introducir la noción de avenencia convirtió –según Silvia Chejter– la violación en un conflicto. Ley de Salud Reproductiva, Visibilidad lésbica, Unión Civil, cientos de organizaciones de mujeres y un camino que, lejos de ser equivocado o constituir una encrucijada, aún hay que abrir. Misoginia e importacionEl atraso del libro de Badinter no deja de ser sospechoso. Hablar de él como si no se hubiera hablado antes, no es novedoso. Entre La tercera mujer de Giles Lipovetsky y La dominación masculina de Pierre Bourdieu han existido innumerables y polémicas producciones teóricas de los feminismos cuyos debates incluían desde intereses nacionales hasta políticas universitarias, pasando por herencias de la discusión entre psicoanálisis y marxismo que refutaron de maneras convincentes las hipótesis del llamado feminismo antiporno y antihombre. Sólo que esos trabajos no figuraban ni en los pies de página de los textos de los maestros revelados en su condición de pertenecientes al megasexo ni en los de Badinter. Claro que si utilizamos por unas líneas ese relativimo acusador que usa Badinter para enumerar las violencias femeninas, podemos decir que esa idea de haberse autoengendrado como autor al igual que un paramecio también existe en el feminismo local. –En este país no hay memoria ni historia. Se está atento a lo último de la teoría, pero sin tener la mínima idea del trayecto histórico de lo propio –dice Ana Amado–. Ni entre las feministas existe lo que se llama genealogías. Entonces todos aparecen como pensamientos inaugurales.La contracara de la desmemoria de las feministas respecto de sus precursoras –y en esto habría que excluir por lo menos los rescates de Mabel Bellucci– y de los autores del primer mundo que intentan oponer feminismo a mujeres es el desinterés de los lectores varones por aquellos textos que incluyen la cuestión de género. Amado dice que en la colección que codirige en Paidós vale la pena rescatar la trilogía sobre El genio femenino de Julia Kristeva que incluye tres tomos dedicados a Hanna Arendt, Melanie Klein y Colette. Y el interés se concentra en el de Hanna Arendt. ¿Reticencia de machos vernáculos aferrados como náufragos a los troncos sustanciales de los grandes relatos, a las tablas de la ley textuales de padres como Borges o Perón? –Nada que ver. Eso es común en el campo del conocimiento, donde los temas legítimos pasan por un carril donde nunca entró el género. Sin embargo en EE.UU. puede que alguien como Adam Philips le reclame a Judith Butler la precisión en el uso de un término. –Pero no deja de ser un reajuste escolástico. –Pero es algo. Durante la presentación del libro sobre Hanna Arendt, Nicolás Casullo sólo en la penúltima línea de una exposición de veinte minutos mencionó la cuestión femenina. (Nicolás Casullo es su marido.)Será por eso que Hombres y mujeres... que originariamente se llamaba algo así como Ruta falsa debe ponerle un cebo al varón con el subtítulo Cómo salir del camino equivocado, cambiando la idea de ruta falsa por la idea falsa –pero vendible– de que se trata de un libro de autoayuda para solos y solas. Atenuantes: es cierto que Badinter no se equivoca cuando advierte que tras la reivindicación de un derecho a la diferencia se perfila la de una diferencia de derechos. Tampoco cuando vuelve al antiguo reclamo de equidad bajo un modelo de las luces que quizás sea necesario no perder del todo de vista. Y recuerda esa reivindicación antigua ya que al parecer sigue sin generar un armisticio: la igualdad en las tareas domésticas y el cuidado de los niños. –Las cosas que tuvo que hacer el gobierno de Suecia para conseguir que los varones optaran por quedarse en la casa para cuidar a sus hijos –se ríe Josefina Fernández–. Primero se planteó la licencia tanto para varones como para mujeres y el tiempo fueron seis meses. Después se aceleraron los procesos de promoción laboral para los varones que se quedaran en la casa. No obstante, siguieron las mujeres mayoritariamente ocupándose de eso. En este sentido las que yo llamo feministas "escépticas" dicen algo interesante y es que el trabajo más importante tiene que estar dado en el orden de la cultura y no sólo a través de las leyes.Así estamos. Mientras algunas mujeres sufren el efecto de la desigualdad en el cuidado de los niños, otras están dispuestas o bien tienen el privilegio de no querer un partenaire para discutir temas tan pedestres como quién va a la reunión de padres o prepara la mochila: Badinter no deja de ser sensata –no habría que atribuirle adjetivos mayores– cuando lanza su advertencia ética a las mujeres que hoy podrían hacer despótico su dominio en la reproducción, al poder recurrir a un frasquito y no a un patriarca. Aunque su potente libro ¿Existe el amor maternal? que atravesaba el sesgo de la historia sobre la palabra instinto no parecía dar cuenta del concepto de inconsciente –y fue refutada por Françoise Dolto, quien criticó los peligros de una interpretación literal que amenazara la causa de los niños–, en Hombres y mujeres, Elisabeth Badinter reivindica la ambigüedad del amor, su difícil reducción a un domesticado pacto de dos y explica sin dejar ninguna duda que no está hablando de violadores y violadas: Pero la atmósfera del texto no se priva de repetir la frase de póster "hay que luchar por la igualdad con los hombres, pero no contra ellos". La Argentina es un país con varias singularidades en cruces de género, pero que lo sacude y lo interroga: Las Madres de Plaza de Mayo, La rama femenina y la enorme cantidad de psicólogas y psicoanalistas; mujeres de clase media que se insertaron en el campo laboral para buscar en la subjetividad femenina y curar sus padecimientos, pero bajo la forma de una por una. No hubo excesos feministas ni ninguna mujer logró ganar un juicio por el discurso procaz vertido desde una obra en construcción o en el colchón de una cama trotadora. Hay victimismo, pero sobre todo hay víctimas y, como bien señala Badinter, los hombres lastimados por los avances de las mujeres en el campo social no largan ni así ni un centímetro de sus espacios. El peligro –más bien el peligrito– es que Chiche Gelblung u Oscar González Oro agarren este libro para demostrar que lo que nunca vino del todo ya fue.

jueves, 12 de junio de 2008

¿QUÉ ES UN HOMBRE? Las respuestas que ya sabía pero siempre quizo reafirmar

Desde el momento en que comenzaron a gatear, ademas de destinar el máximo de rendimiento de nuestras neuronas a interpretar todo lo que el mundo nos depara, debemos reservar una parte (a veces hasta un hemisferio completo) de nuestro cerebro para descifrar las reacciones, berrinches y necesidades del llamado "sexo fuerte". Comenzando por el hermano mayor que , celoso ante nuestra llegada se ha propuesto romper todos nuestros sonajeros, pasando por el galan quinceañero que se marchó con nuestras pertenencias más preciadas, hasta ese supuesto "hombre hecho y derecho" que a los treinta y cinco aún nos mira con cara de "what`s" cada vez que comentamos acerca del matrimonio. Todos los hombres que pasan por nuestas vidas de un modo u otro nos empujan a cuestionarnos acerca de qué es exactamente un hombre y cuáles son los usos prácticos a los que puede destinarse.
Es probable que Ud ya adulta esté algo cansada de lidiar a diario con situaciones que no alcanza a descifrar muy bien. Incluso debemos tolerar muchas veces que se nos acuse de "complicadas" e "incomprensibles" y las baratas frases como "a una mujer no se la comprende, se la ama" e idioteces similares. Puede, quizás, tal vez, que haya en estas frasesitas un dejo pequeño y distante de verdad, pero si de algo estoy segura es que los "hombres" desde muy niños evidencian conductas que se verán reflejadas en su comportamiento de adulto, es decir... seguirán comportandose cual niños malcriados durante toda su existencia.
Por alguna caprichosa razón de la naturaleza, de pequeños las mujeres y los hombres no tenenmos mayores diferencias físicas, con excepcion a los organos genitales. Pero en general y a lo largo de la vida, las niñas no se muestran interesadas ni en la similitud, ni en la diferencia. En contraposición, los hombres son los primeros en tomar distancia de las mujeres como única vía posible de acentuar su masculinidad. Jamás lo admitirían pero es posible que alguno de ellos haya transitado con el temor de atender el telefono y ser confundido con su mamá o con la voz de una niña, y es ese mismo niño que por las noches dormía con su Teddy.
Cuando van creciendo un poco más, suelen recurrir a cuanto personaje de fantasía se les cruce. Se trepan a los árboles como Tarzán y se esconden tras las ramas cual Rambo, si es que no están de patadas cual Power Rangers. Lo cierto es que este pichón de hombre está muy lejos de alcanzar su esplendor como exponente masculino y en su afán hecha mano de cuanta situación riesgosa existe para simular que ya es todo un hombre.
Quizás la etapa más terrible en la vida de estos muchachos es la de la adolescencia cuando estan totalmente indefinidos: no son grandes, ni chicos; se ven desgarbados flacos y altos algunos, gorditos-corcho otros. Amén de los cambios en sus genitales que está a punto de volverlos ¡locos!.
En este punto las historias que escuché son patéticas: quién la tiene más larga, más ancha; quién orina más lejos; quién acaba más (eyacular) y cúan lejos llega. Son tan tarados que mientras las mujeres ocupan su tiempo en cosas más productivas (aunque sea aprender a tejer, a maquillarse en últimos casos) estos buenos muchachos sólo les preocupa seguir afianzando su ya establecida virilidad.
Claro sé que la vida no es fácil para un hombre, debe ser dificil intentar parecer macho infalible con papá, bebe con mamá y un hombre con su pareja, son tres papeles antagónicos pesaditos. Y es exactamente la exigencia de no fallar en ninguno de estos vertices lo que impide a contar honestamente lo que le fastidia, le molesta y le duele, mucho menos si le causa temor.
En lo que respecta al pasado, nuestros hombres se muestran totalmente receptivos a la "verdad" de una mujer, pero cuando logran poseerla, les es imposible manejarla, ahí surge el macho que en su interior piensa que la virginidad sigue siendo un pasaporte seguro a una relación... pero nunca dirán eso . Y aún si aceptan un pasado, hay que tratar de que el pasado no pase de 3 o 4 parejas. Hay que tener en cuenta que ningún hombre elige a una mujer de forma independiente, todos o una gran mayoría termina casandose con mamá o con alguien totalmente diferente a ella.
Por esto y otros muchos puntos más es que si Ud pese a todo a elegido vivir su vida al lado de un especimen masculino debe tener en cuenta ciertos consejito de Mamá Gata:
- Apele a su instinto domesticador frente a todo y pese a todo, lo que tiene adelante es un animal grande, feo y peludo... pero recuerde... si alguien le pudo enseñar a un oso a bailar... Sea inteligente.
- A pesar de tener (algunas mujeres) un instinto maternal o estoico, Ud. NO ES SU MADRE, NO LO FUE, NI LO SERÁ NUNCA. Déjelo claro siempre...y tengalo en claro siempre.
-Ud es una mujer soberana e independiente, y no le importa si su suegra fue Santa Ama de Casa, si él aceptó conductas desde un principio, no le permita que las modifique después de un tiempo de relación, recuerde que como el niño que es siempre querrá tener sus juguetes al llegar a casa.

¡Y recuerde que siempre existe la posibilidad de vivir
FELIZMENTE SOLTERA HASTA QUE LA MUERTE LA AGARRE A LOS 50, EN UN ORGASMO, CON UN SEX TOY DE 20!

P/D ¿No les parece que ya estoy pa`escribir artículos en Cosmopolitan?

martes, 10 de junio de 2008

¡¡¡¡¡DESPIERTAME CUANDO PASE EL PARCIAL!!!!!!!!!!

Mis queridos amigos blogueros:


Ante todo quiero dar las gracias por todos los que de alguna manera me hacen llegar su amistad, su apoyo y ternura frente a mis ausencias.... estoy loca y como loca. Pero pese a todo me siguen teniendo en cuenta para estos premios maravillosos. Como no he tenido tiempo de pasar por los Blogs a ver que andan haciendo mis blogueros favoritos, esta vez me quedo con todossssss los premios pa´ mi solita!!!!!!!!!! (Se que Uds. seguiran aterciopelando los oidos, despertando las mentes y arrancando una sonrisa como siempre lo saben hacer) LOS ADORO y realmente son mis aliados, mis complices y mis ganas de seguir en esta vida un tanto dificil!

GRACIAS YERMAN

GRACIAS BORDER

(a ti y a todas esas sensaciones que hemos vuelto ha descubrir)

miércoles, 4 de junio de 2008

¡VENÍ QUE TE HIERVO EL CONEJO!

Hay dos cosas que el hombre no puede ocultar
que está borracho y que está enamorado
Antífanes
(Comediografo Griego)

"Me llamaba diez ,quince y hasta treinta veces en un día, algunas veces estoy segura de que llamba sólo para saber si estaba en casa y luego cortaba el teléfono sin nisiquiera responder. Me esperaba después del trabajo, una vez lo descubrí oculto detrás de un auto frente a mi trabajo espiandome. Tenía celos de todo y de todos, una vez hasta se molestó porque mi hermanito me dijo que estaba muy linda y me dió un beso... cuando la situación no dió para más, le dije que ya no quería seguir con él, ahí fue que todo empeoró..."



Así se confiesa una mujer que se encuentra internada en el hospital después de que su ex-pareja intentó atropellarla a la salida de su trabajo. Este ataque "sólo" dejó en la víctima un par de costillas rotas, unos magullones y la sensación de que puede no haber próxima vez.
En el famoso film "Atracción Fatal
" vemos como la "enamorada" amante frustrada, es capaz de atentar contra su vida y contra la de los demás, amén de las bajezas que está dispuesta a realizar y hasta cuasi-secuestrar a un menor a fin de conseguir que su "amor" regrese con ella.

"El amor" que fue un tema despreciado por la ciencia por mucho tiempo es ahora uno de sus objetos de estudio. No sólo por la evidencia de que es un proceso bioquímico que genera desde sensaciones físicas intensas hasta distorsión de la realidad, sino también por las numerosas patologías que pueden convertir al amor en una verdadera pesadilla.
Muchos científicos comparan los síntomas del estado de enamoramiento con el cuadro siquiátrico denominado “desorden obsesivo compulsivo” (DOC), pues en ambos casos los procesos bioquímicos que ocurren en el organismo son similares.
Así se comprobó con diversos estudios realizados en los últimos tiempos, donde se indica que la serotonina- neurotransmisor que actúa como sedante en el cerebro- presenta niveles significativamente bajos en la fase más intensa del enamoramiento, lo que explicaría las reacciones ansiosas y agresivas del enamorado, que son equivalentes, en términos bioquímicos, a las de pacientes que presentan DOC.
Esto no significa que el amor sea considerado una enfermedad, pero sí que posee, especialmente en su primera fase, características similares a algunos trastornos sicológicos.

En una primera parte del enamoramiento la persona se encierra en sí misma. Adapta las características del otro a su ideal para que cumpla con sus necesidades. Así mismo resta importancia a aquellas que no le sirven, esta distorsión de la realidad es normal en los enamorados, pero podría convertirse en patología si se transforma en algo permanente.

Otra sustancia liberada por el cerebro en esta etapa es la feniletilamina, que aumenta la energía física y la lucidez mental. Ante la desilusión, el nivel de feniletilamina se derrumba, y el cuerpo experimenta la sensación de depresión y tristeza. En términos psicológicos, este mal provoca un verdadero duelo en la persona, aunque la relación nunca se concretara.

Esta sensación de frustración, depresión, tristeza puede conducir a quien la padece, en los casos más extremos, a agresión física, asesinato y/o suicidio. Estudios internacionales indican que personas con alteraciones en la tiroides suelen presentar celos patológicos porque están más predispuesto a sufrir obsesiones, manías y neurosis. Los celos también han sido asociados a cuadros de delirio paranoide.

Es así como estos sentimientos que generalmente son de celos irrefrenables e insoportables comienzan a adueñarse del sujeto hasta la "locura". Nos encontramos frente a una patología, lamentablemente, muy común, una forma de Desorden Obsesivo Compulsivo que es un trastorno perteneciente al grupo de los desórdenes de ansiedad, este ha sido considerado hasta hace algunos años como una enfermedad psiquiátrica rara que no respondía al tratamiento, actualmente es reconocido como un problema común que afecta al 2% de la población, es decir, a más de 100 millones de personas en el mundo. La principal característica consiste en pensamientos recurrentes, incontrolables y obsesiones desagradables o comportamientos repetitivos que no son controlados voluntariamente por el individuo. El nombre de esta enfermedad proviene de sus dos principales síntomas: obsesión y compulsión.
Las obsesiones son ideas, imágenes o impulsos frecuentes y persistentes que son egodistónicos, lo que significa que no son producidos voluntariamente, sino que invaden la conciencia y son repugnantes o sin sentido. A pesar de que el enfermo intenta reprimirlos, la mayoría de las veces resulta imposible.
Por otro lado, las compulsiones son comportamientos repetitivos que se realizan siguiendo siempre un estereotipo. El comportamiento está diseñado para producir o evitar algún acontecimiento o situación futura. Se lleva a cabo con una sensación de compulsión subjetiva junto con un deseo de resistirla, al menos inicialmente. Generalmente se reconoce la falta de sentido de dicho comportamiento y no se obtiene ningún placer al llevar a cabo esta actividad, aunque le provoca un alivio de su tensión.

¿QUÉ HACER?
Existen ciertos tratamientos ya establecidos para controlar la enfermedad; sin embargo, la mayoría todavía se encuentran en vías de desarrollo. Existen tratamientos farmacológicos aunque la mayoría son tratamientos psicológicos y conductuales; o en su defecto, ambos deben combinarse para dar mejores resultados.
No caer en la típica actitud de que con amor se cura el mundo, porque no es así, no quieras ser Dios/a, si tu relación con la persona enferma es más fuerte que un simple revolcón o es un familiar, busca ayuda médica y psicológica. En caso contrario, existen muchas lucecitas que nos advierten que algo no anda bien, hacele caso a tu instinto y huí despavoridamente ante la primera señal. Si ya es demaciado tarde, ten en cuenta que lo importante es mantenerse tranquilo ante las escenas de un obsesivo, si logra "sacarte de casillas" habrá ganado parte de la pelea y sabrá donde golpear. Alejarse de los lugares que solemos frecuentar por un tiempo, apoyarse en los amigos para que en caso de ser consultados no den información sobre tí. Muy importante es que si sientes que tu vida peligra, recurre a las autoridades, no son una gran garantía en este país, pero es peor que nada. Y si al final nada resulta, un viaje a las islas Tumbuctú a limpiar pinguinos empetrolados es una buena solución...